CRONICA DEL FIN DE SEMANA DEL 12 DE JULIO EN LA PLAYA

Crónica que llega con retraso, vuelvan a perdonar las molestias

Una semana después de aquella borrachera antológica con la imagen del hombre tragando arena volvimos a la cala de la vida. Esta vez no vino el Farapo.

Repetimos la misma jugada que la semana anterior: cena express, y unos cubatas antes de salir. Esta vez Terrance & Philip se apuntaron a la jugada. Salimos de casa muy dignos:



Y la noche se empezó a liar, y es que la situación era incomparable: Garage no estaba lleno, por lo que pronto nos hicimos los amos del txemy. Además los temazos no sonaban, sino que te agredían: véase Extremoduro, Marea, Red Hot, Guns N Roses y mil más. El alcohol hizo el resto:



Nos bebimos el Océano Atlántico. Si, las banquetas de aquí para allá, vasos de cubata que recuerdo como se estrellaban contra unos de los pilares del bar..... destrucción y borrachera total.

Sonó "Creep" de Radiohead y con él el encendido de luces. Salimos del bar después de estar hormigonados 4 horas dentro sin salir, y fue un poco como una manada de hooligans que los tienes encerrados y de pronto los sueltas: salimos eufóricos. Cánticos, vítores, bailes tradicionales, camisetas al viento, la ancestral costumbre de arrancar ramas e ir reventando lo que pillas, señales de tráfico que acaban mal paradas...



Todo el camino hasta la Cala cantando. Y mira que hay trozo, por lo menos media hora andando. La gente a nuestro paso flipaba de la cogorza que llevábamos. Claro, es que daríamos miedo. Pero es que incluso ya en la puerta mismo de la cala estábamos cantando como si hubiésemos ganado la copa de Europa:



Hasta en el mítico zig-zag de llegada al apartamento estábamos en plan camisetas al viento:

Llegamos a la puerta del apartamento a grito pelado, un volumen tal que claro despertamos a todo dios. Bueno, sobre todo porque el Barra se confundió y bajó un piso más abajo y estaba gritando cual pescatera en la misma puerta de mi vecino de abajo que es un demonio que te cagas. Tanto gritaba que mi vecino abrió la puerta diciendo la mitica frase: "Mario, se lo voy a decir a tu madre" (sin comentarios tengo 27 tacos), mientras yo me escurría como un reptil y salía pitando descojonándome.

Aun tuvimos pelotas y nos bajamos a la playa a echar el tipico baño de borrachos, y de la vuelta prácticamente no recuerdo más que esta imagen de la Vela descuajeringada sin poder levantarse en el pasillo que llega hasta el apartamento:


Al dia siguiente eramos la comidilla de toda la Cala. Habíamos despertado hasta a los muertos con nuestros cánticos populares. Cualquiera que me cruzara me decía frases tipo: "jodo ayer como la liasteis despertásteis a todos", por lo que me mantuve lejos de las miradas del personal, excepto de mi vecino que bajé a disculparme y a entonar el mea culpa. Este era el aspecto de mi vecino cuando me vio llegar:


En fin, que le jodan que semejante borrachera bien merece una excomunión. Mil veces que pudiera vivir esa noche, mil veces que no cambiaría nada.

Ese mismo sábado fue el día de la gran tormenta en Salou, y este video grabando la cala da buena cuenta de ello:



jajaja qué graciosa eh. Parecía un spot de Martes y 13.

Por cierto aquí tenéis las fotos de este finde ordenadas y retocadas, sobre todo ojos rojos:
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Y aquí las del finde anterior del Farapo traga-areneros:

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